Profesionales entregan recomendaciones para detectar oportunamente los síntomas de un infarto agudo al miocardio
Según estadísticas del Sistema de Gestión de Garantías Explícitas en Salud (GES), en el 2023 se registraron 801 casos de esta patología y en el primer semestre 2024, la cifra es de 364 diagnósticos. Por esta razón, es importante reconocer sus síntomas a tiempo y prevenir su aparición.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en Chile y también en nuestra Región, y el infarto agudo al miocardio (IAM) es una de las más comunes. Esta patología está directamente relacionada con estilos de vida y hábitos saludables, por lo que, durante agosto, en la conmemoración del Mes del Corazón, profesionales del Servicio de Salud Ñuble enfatizaron la importancia de adoptar medidas de autocuidado.
“Durante 2023, de acuerdo con las estadísticas del GES, se registraron 801 casos de infarto agudo al miocardio en Ñuble, un 8% más que el año anterior, y en lo que va de este 2024 ya se han confirmado 364 diagnósticos. Por ello, es clave reforzar el llamado a reducir factores de riesgo como el desarrollo de diabetes, hipertensión, dislipidemia y tabaquismo. La actividad física regular y los hábitos saludables son fundamentales para prevenirlo”, señaló la Directora del Servicio de Salud Ñuble (SSÑ), Elizabeth Abarca Triviño.
Asimismo, la directiva precisó que, “este es uno de los 87 problemas de salud incluidos en el GES, por lo que cada persona diagnosticada cuenta con garantía de acceso, oportunidad de diagnóstico, control de seguimiento y protección financiera”.
Detección oportuna
Es fundamental detectar esta esta patología a tiempo. Así lo destacó el cardiólogo y Subdirector de Gestión Asistencial del SSÑ, Dr. Max Besser Valenzuela, quien explicó que, “el infarto agudo de miocardio se produce cuando se obstruye el flujo de sangre que llega a una sección del músculo cardíaco. Si este flujo de sangre no se restablece rápidamente, esa área se lesiona debido a la falta de oxígeno y se produce necrosis, es decir, el tejido comienza a morir”.
“Sabemos que la prevención es clave, pero también lo es el reconocimiento oportuno de síntomas, como dolor o sensación de peso u opresión en el pecho, dolor que a veces se extiende a uno o ambos brazos y al cuello o mandíbula; dificultad para respirar, náuseas, sudoración fría y mareos. Ante estos, es necesario acudir de inmediato al servicio de urgencia más cercano, puesto que es de vital relevancia reaccionar lo más rápido posible, ya que la atención oportuna permitirá salvar la vida y disminuir el daño al corazón u otras secuelas”, añadió el especialista.
La prevención siempre será el mejor y más eficaz consejo para evitar un infarto al corazón. La recomendación es a modificar factores de riesgo, como dejar de fumar, mantener un peso adecuado, realizar actividad física diariamente, al menos 30 minutos al día y adoptar una alimentación saludable. Esto implica reducir el consumo azúcar, sal y grasas, y aumentar el consumo de pescado, frutas y verduras. Todos estos cambios pueden tener un impacto significativo en la salud cardiovascular.